Apenas unos centenares de personas han participado en la manifestación del 1 de mayo convocada en Pamplona por UGT y CCOO. A las marchas de los dos sindicatos, profundamente canalizados y politizados por el PSOE, no han faltado cargos socialistas como el vicepresidente primero del Gobierno foral, Félix Taberna, el portavoz del PSN en el Parlamento navarro, Ramón Alzórriz, el senador Javier Remírez o la portavoz socialista en el Ayuntamiento de Pamplona, Marina Curiel.
Sin duda, un pinchazo en su convocatoria en Navarra, como viene siendo habitual en los últimos años en un acto que ya no genera ningún interés ni simpatía a los propios trabajadores y al que acuden liberados sindicales y asalariados de las dos centrales.
El lema de este año, absolutamente complaciente con la política socialista y nada reivindicativo, era 'Por el pleno empleo, reducir jornada, mejorar salarios' y de la mano de la estrategia política del PSOE, secundada en Navarra por María Chivite, han pedido una "regeneración democrática de este país", la campaña iniciada desde Ferraz tras el estratégico amago de dimisión de Pedro Sánchez para, entre otras cosas, poder amordazar a los medios de comunicación que no comulgan con sus ideas.
La manifestación, más desangelada incluso que las de años anteriores como consecuencia del frío y la lluvia, ha partido a las 12 horas de la sede de los sindicatos, en la avenida de Zaragoza de Pamplona, encabezada por los secretarios generales de ambas organizaciones, Jesús Santos (UGT) y Chechu Rodríguez (CCOO).
El secretario general de UGT de Navarra, Jesús Santos, ha exigido este 1 de Mayo "pleno empleo, reducción de jornada y la mejora de los salarios". "Queremos conseguir en esta legislatura el pleno empleo, tenemos que ponernos las pilas", ha dicho, para señalar que "la reducción de la jornada laboral a 37 horas y media tiene que concretarse de una vez por todas para que sea una realidad en este 2024".
Se ha echado en falta en su discurso las inexistentes huelgas y manifestaciones convocadas por su sindicato por los encarecimientos del IPC, la vivienda y el coste de la vida en general que trae como consecuencia la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores a los que aseguran defender.
Lo que sí ha dicho es que "sigue existiendo margen para subir salarios". "Después de un largo periodo en el que el reparto de la riqueza se ha hecho de manera poco equitativa, es fundamental seguir aumentando los salarios porque demasiadas familias estén pasando serios apuros económicos", ha expuesto.
Tampoco se ha referido a los datos aportados este lunes por el Defensor del Pueblo de Navarra quien, con la estadística en la mano, ha constatado el crecimiento de la pobreza y la desigualdad social desde que el Partido Socialista gobierna en Navarra, pero sí que ha tenido tiempo para hacer campaña por el PSOE de cara a las elecciones europeas.
Por su parte, el secretario general de CCOO de Navarra, Chechu Rodríguez, en un simbiótico papel con su homólogo en UGT, ha manifestado que es necesario defender la democracia en España. Con cero autocrítica y sin explicar por qué cuando gobierna la izquierda desaparecen de las calles, ha dicho que su sindicato saluda que Pedro Sánchez "no haya dimitido, mantenga el Gobierno y se plantee a partir de aquí la agenda social y política para la defensa de los intereses de la gente, de la democracia y de nuestras instituciones", en un ejercicio más de peloteo al líder como los que se han visto muchos días atrás.
