"Perras, todo el santo día perras, no hay acto aberchándal que no te tengas que meter la mano a la cartera. O te la metan".
- domingo, 28 de abril de 2024
- Actualizado 10:23
Los aberchándales siempre te están pidiendo perras. Da igual dónde mires, todo el rato tienen una hucha para meter perras para los presos etarras, una carta amenazante exigiendo las perras revolucionarias para los etarras, un zulo para secuestrar al empresario que no quiere pagar las perras de la extorsión de los etarras, un Nafarroa Oinez recaudando perras para sus ikastolas o una Korrika con Josu no me llames Ternera en primera fila, agitando al cielo el amasador de pan del que atan la ikurriña, como se le pudo ver en la edición de 2022, para conseguir más y más perras para el euskera.
Abro paréntesis. Es curioso lo del amasador, no podían haber elegido mejor el objeto que se pasan de mano en mano de forma mística -otra tradición vasca milenaria de los años ochenta del siglo XX, como el himno del Bilbao (sic), que es de 1983, por ejemplo-. Yo antes de conocer cuál era su función, ya sabía por los tebeos que para lo que servía ese pedazo de madera era para pegar mamporros. Si alguien te perseguía con ese utensilio en la mano era para descalabrarte la cabeza a la altura de la nuca.
Amasador de pan-pan-pan-pan. Cierro paréntesis.
Solo espero que el alikate Asirón nos ahorre verlo correr de nuevo como un papa Klemente del aberchandalato por las kaleas de Irroña. Si vuelve a ocurrir, por favor, metan a los niños en casa y nos les expongan a semejante espectáculo traumático. Hay
que prohibir el porno político a los menores urgentemente. Y a los sesentones con el IMC disparado, los alardes deportivos, que les puede meter un marichalazo fulminante y quedarse ahí, carne de chapa en el suelo con fecha y nombre, para siempre.
Perras, todo el santo día perras, no hay acto aberchándal que no te tengas que meter la mano a la cartera. O te la metan, que desde que han descubierto los etarrillas que es más fácil conseguir las perras desde las instituciones públicas, extrayendo la pasta del presupuesto de todos -ese que dicen que es para educación y sanidad... sí, ya, por los cojones- ahí están, soltándose ellos mismos perras a mansalva.
Jotaké y perras. Y con eso los mandamases, para los pringados de euskoabajo no llega, van tirando la mar de bien pagándose las vakatziones de agosto y los peskaditos fritoak en Konil de la Muga, provincia de Euskadiz.
Para la cosa esa con k donde corre Josu no me llames Ternera, el alikate Asirón leo que se acaba de soltar de presupuesto publico 6000€ para comprar un kilómetro. Comprar un kilómetro de suelo público con dinero público para uso privado. Pide luego tú permiso para cerrarte unas calles de Pamplona para hacer negocio privado, sin pedir perras públicas, a ver qué te contestan esos mismos. Negocio redondo, oye, sobre todo para educación y sanidad, que es para lo que nos dicen que pagamos impuestos cuando nos quejamos de que se gastan perras en txorradas como si no hubiera un mañana.
Perras, perras, todo el día perras. El euskera parece un Onlyfans: si quieres que te lo enseñe, suéltame perras. Sin perras no hay paraíso ni puesto de funcionario publikoa. Qué koñazo, tú. Otro más. Y eso es todo.
